18/09/2019 El Día (PBA - La Plata) - Nota - 

Julio Alfredo Encabo

18 de Septiembre de 2019 | 02:16 | Publicado en Edición Impresa

Fue un prestigioso médico de la Ciudad con una extensa trayectoria en el Hospital Italiano, pero además Julio Encabo se destacó por su sencillez y trato humanitario, por eso su fallecimiento provocó numerosas muestras de pesar. Había nacido el 15 de junio de 1934, en 9 de Julio, provincia de Buenos Aires. Fue el hijo mayor de Sara y Julio y creció junto a su hermano Roberto. Al completar sus estudios secundarios llegó a La Plata para comenzar la carrera de Medicina en la Universidad Nacional de La Plata. En ese momento contó con la valiosa contención de sus tíos Roberto y Alcira Vieta, quienes lo recibieron en su casa y lo trataron como a un hijo. Con los años sus padres se radicaron en esta Ciudad en la que su hermano completó la carrera de abogado. Sin embargo a Julio siempre le gustaba volver a su ciudad natal para reencontrarse con los lugares y con los afectos de su niñez. En 1961 se casó con Susana Buccigrossi y de la unión nacieron sus hijas Patricia y María Laura.Su felicidad se completó cuando sus hijas se casaron y nacieron sus siete nietos Francisco y Felipe Cieza Rodríguez; Milagros, Augusto - ya fallecido - , Candela, Tomás y Mercedes Rossini. También expresó un gran amor por sus yernos Luis Felipe Cieza Rodríguez y Miguel Augusto Rossini, a quienes trataba como si fueran sus hijos. Desarrolló toda su carrera en el Hospital Italiano de esta Ciudad. Fue miembro fundador de la residencia de Ginecología, el primer jefe de ese servicio y continuó trabajando con una inquebrantable vocación hasta que se retiró a los 78 años. Solía decir que consideraba al Hospital Italiano como a su segunda casa. Esa comunión afectiva y el compromiso con el bienestar de sus pacientes lo mantuvieron en actividad por 50 años. De perfil bajo y una gran humildad, Julio Encabo se caracterizó por ser un hombre de buen carácter. Fueron esas cualidades con las que siempre transmitió cercanía y para muchos ese hombre, además de ser un gran profesional, fue simplemente “Julito”. El tiempo que le dejaban sus actividades profesionales le gustaba pasarlo en familia y con amigos. También tuvo una gran afección por los viajes y lo hizo decenas de veces a Europa y a Estados Unidos, donde reside una de sus hijas.   Si llegaste hasta acá es porque valorás nuestras noticias. Defendé la información y formá parte de nuestra comunidad. Suscribite a uno de nuestros planes digitales. SUSCRIBIRME

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